lunes, julio 09, 2007

VIDA CHOTUNA(V): QUÉ VIENE EL COCO…


Sí amigos, en innumerables ocasiones hemos oído hablar del coco. No nos referimos a Francesco Coco que fue defensa del BarÇa y luego del Inter de Milán, ni a Alfio “Coco” Basile actual seleccionador del equipo nacional de fútbol de Argentina(y que también fuera entrenador Gilero del Atleti famoso por su “sho me cago en el contrato"), ni tampoco nos referimos a nuestro entrañable y carismático Coco o Supercoco de The Muppets Show aka Barrio Sesamo por estas tierras.

Cuando en nuestra más tierna infancia nos hacían mención al Coco se trataba de un ser despiadado y fulero, que metía en el saco a los niños para vete a saber qué cosas. En el día de hoy, en nuestro entrañable y carismático diario Ideal nos encontramos con otro COCO, éste por cierto bastante ruin e impresentable, que no entiende de amistad ni de nada que se le parezca. Pues nada, como lo han trincao le deseamos una feliz estancia en Jaen II D´or Ciudad de Vacaciones, que al menos este verano en el chabolo-talego a la sombra se está fresquito.

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5 Chismorreos varios:

At 2:26 p. m., Blogger carlosmondovega said...

Menuda prenda. Que te gustan a ti las historias de delincuencia urbana, eh??

 
At 2:57 p. m., Blogger raul said...

Y rurales, que Castillo de Locubín no es precisamente una metropoli...

Lo más mejor es siempre la subcultura y el folklore, da igual de la etnia que provenga...

 
At 3:36 p. m., Blogger Javier said...

Lo mejor de todo el nombre del comercio en cuestión:


Chucherias Merche.
Eso debería ser un atenuante para el coco...solo quería unas galletitas para el monstruo de las galletas....
Dame golosinas, golosinas dame....

 
At 5:41 p. m., Anonymous Anónimo said...

Con amigos como este estas salvao!
Madre mia que concepto de la amistad hay en castillo locubín, yo no pararé ni a dar un recao por si acaso.

 
At 2:45 p. m., Blogger Isabel Sira said...

Justo eso iba a decir yo, cruzcampero,que con amigos como esos, mejor estar solito.
Y el nombre de la tienda, pues de la tierra...Y de la Merche je je.
Eso sí, creo que ese coco es mucho peor que el de nuestra infancia, que, al fin y al cabo, nunca se materializó, sólo tenía mala prensa ¿y si el pobre sólo quería a los niños para jugar y no sentirse sólo? ¿y si realmente lo que hacía era invitarles a merendar?

 

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