QUE RUINA PRESENTA(I): ¡UNA DE MARKETING!

Pues sí, hoy estrenamos sección para hablar de las películas cotidianas que todos los días nos pasan, suceden o nos quieren vender.

Llevo varios días dándole vueltas a la cosa esta del marketing que, en pocas palabras, se trata de estrategias y prácticas que buscan el aumento del comercio, especialmente de la demanda. A lo largo de los tiempos siempre ha existido esto y si me voy a mi más tierna infancia me acuerdo cuando iba las primeras veces al mercaillo y escuchaba a los gypsys entre ellos gritarse a todo trapo el célebre “Vamos a vendeeeeeeeeeeeer, vamos a vendeeeeeeeeeeeeeeeeeeer!” A mí esa estampa me parecía tremendamente ridícula, pero es que últimamente me he encontrao con varios ejemplos que les superan en esperpento; y se supone que estos grandes creadores de ideas y campañas tienes masters y han estudiado en prestigiosas universidades.

Ejemplos: A primeros de este mes en Barcelona una compañía aérea irlandesa se propone regalar un billete de avión a todo aquel que se manifestará en contra de una compañía patria. La propuesta no puede ser más rastrera: primero por vilipendiar a una empresa competidora, segundo por aprovechar la movida del aeropuerto del Prat de este verano y tercero por el afán de gratis total que tiene la peña(una pena que fuera en Barna porque luego hablan del amor a la pela en esta región cuando es un sentir general de la piel de toro). Por suerte, la jugada no les salió muy bien, parece ser que iban a repartir 400 billetes y allí había ciento y la madre por lo que se armó un pollo de narices y a una chica de la compañía casi la “curran”; a estos lumbreras les han caído 150 denuncias de personas que fueron con su carterlillo a por su billete y ¡no recibieron su regalo!

También leo en la prensa que una nueva compañía de telefonía móvil que saldrá para Navidades va a lanzar una agresiva campaña de precios y buscará nichos de mercado sin explotar, es decir, que les va a tirar el gancho especialmente a inmigrantes, universitarios y a público gay. También leo que esto ya se viene produciendo en otros países en USA hay una compañía(faithmobile)que a sus clientes cristianos envía desde salmos a politonos con música eclesiástica o citas de la biblia por sms. En Dubai otra compañía ofrece un servicios de vibración automática que recuerdan a los fieles la hora del rezo y el calendario del Ramadán, etc, etc.

Y ante esto me pregunto que pasa con la gente corriente; ¿Y a los gañanes qué? ¡Qué los gañanes no somos cosas, que somos personas Mieeeeeeeeerda!

Es que cuando oigo rollos de marketing me pongo negro, me quedo con los gypsys que aunque parezca mentira en esto no engañan: "Vamos a vendeeeeeeeeeeeer, vamos a vendeeeeeeeeeeeeeeeeeeer!”