S.O.S. desde Coimbra (I): Llegada ¿triunfal?

Sí, amigos. Fijaos en el mensaje de socorro subliminal que se percibe a través de extractos rescatados del diario de Richar, nuestro compadre exiliado en Portugal durante unos (ya largos) meses. Por favor, si alguien se siente identificado con esta cruda realidad de estudiante-emigrante, que se desahogue aquí o calle para siempre!

Cotorras portuguesas: "La llegada fue muy dura, tardamos más de una hora en encontrar la jodida residencia, ¡es que esta gente no le pone nombre a las calles!. Al entrar en Coimbra, cuando nos dimos cuenta por donde íbamos en el mapa, habíamos cruzado ya toda la ciudad. Después de encontrar la universidad costó horrores encontrar la residencia, pasamos 2 veces por la puerta y no sabíamos que era esa. En fin, una vez dentro y después de llegar reventados dimos con la cruda realidad, a mi me mandaron al sótano, donde nadie quiere estar, y a Rebeca a la 4ª planta, con las chicas. La residencia es ppalmente de chicas y los chicos están aislados. A ella le tocó una compañera de habitación y las chavalas que nos recibieron le decían a ella que aprendiera pronto portugués, ¡como les va el marujeo!. (...)"

El zulo y la gorda chingadora: "La residencia es deprimente. Por un lado a ella le tocó una compañera de unos 200 kilos (sin exagerar claro), que por supuesto, no hace falta decirlo, ronca. Además la muchacha tiene allí su novio que pasa todo el rato en la habitación y a veces Rebeca ha entrado en plena faena. En cuanto a mí, me tocó un maravilloso apartamento soleado en el sótano, jajjajajaa, ¿cómo va a ser soleado si está en el sótano?. Un pequeño habitáculo con una diminuta ventana por la que no entraba el sol. Esa planta siempre está solitaria porque la gente intenta irse a otra, ya que las demás tienen terraza. Lo único bueno es que no tenía compañero, claro ¡todos emigran de esa zona!. Igual somos especiales, pero no teníamos más remedio que pasar el día en la calle hasta la hora de acostarse. Así que no había duda de que era necesario mudarse pronto (...)". CONTINUARÁ...

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