EASTER LONDON(I): ¿DÓNDE SE COME Y SE BEBE AQUÍ?

Día 1, 4 de abril 2007.

Tras llevarme la maleta al curro, quedar las 14:30 en Antón Martín con Tomás que venía de Alcazar de San Juan y recoger a Carmen en Tribunal nos dirigimos a Barajas. De allí un avión de Easy Jet(mi primera experiencia con una low-cost fue positiva) rumbo al aeropuerto de Gatwick y, tras esperar un rato largo a recoger las maletas, seguidamente a montarse en el Gatwick Express(37€ ida y vuelta, el truco del viaje barato). A las 8 de la tarde estábamos en Victoria Station y a 50 metros de nuestro hotel. El Comfort Inn Hotel de Victoria es un hotel cojonudo(únicamente lo diré aquí para no hacer mucha publicidad), la habitación triple con desayuno incluido a 140€ noche, bastante amplia, limpia y el baño bastante bueno. Lo gracioso fue que cuando llegamos a la recepción tenían la tele puesta con el canal internacional de Tve y con el programa de Los Morancos, a mí me resulto cachondo ya que hacía mucho tiempo que no los veía y precisamente me los encontraba en Londrés. Luego comprobamos que una de las chicas de la recepción era española, barcelonesa para más señas.

A eso de las 9 nos fuimos al St George´s el pub en frente del hotel, al jugarse la ida del Chelsea-Valencia de Champions el garito estaba abarrotao de gente, nos pillamos las primeras pintas del viaje(Strombow y Carling) y a esperar a que acabara el partido para pedir algo para comer. 45 minutos después nos decidimos a pedir la cena cuando nos comunican que la cocina del Pub estaba cerrada y entonces...dónde comemos. A las 10:30 llegaron Elena(sobrina de Carmen) y su novio Kader, pero mientras llegaban nos dio tiempo de contemplar el grado de histerismo que despierta el cricket entre los británicos, ¡una emoción! Tras dar una batida por los alrededores de Victoria y siendo la hora que era, casi las 11, no hubo otra opción que un Burrikin(la primera y última vez durante el viaje, no había otra), después de comerme una triste hamburguesa de pescado a recorrer el distrito de Westminster por la orilla del Tamesis; contemplar en la noche con toda la iluminación nocturna el Big Ben(gran Benito), la Abadía, el Parlamento y el London Eye(la noria más grande del mundo) es una pasada, aunque eso sí el Big Ben es más chiquitico de lo que aparenta en la tele, o al menos eso me parece después de ver los mazacotes que hay en NY.

Tras el paseo nos adentramos en el Centro de la ciudad, zona de Leicester Square y Picadilly Circus pero claro eran las 12 y todos los pub cerrados(dónde se bebe aquí) y solo estaban abiertos los clubes y discotecas. Intentamos entrar en el Shadow Lounge de Brewer Strret, una disco gay de gran solera y de buen ambiente(no solo el gay), de lo único potable a esas horas, pero los porteros en la entrada no nos dejaron pasar porque no teníamos pinta de gays a pesar de que nosotros insistimos(increíble pero cierto). Después de esto nos topamos con un relaciones públicas que nos llevó a otra disco, el club 49 pero la cosa no nos gustó. Mucho niñato pijo/posh bebiendo champan y cócteles y a un precio prohibitivo; una vez allí aproveché para entrar al baño a cambiarle el agua al canario, dentro de los baños había un negrón(negro mu grande) puesto por la dirección controlando lo que pasara por allí y además te pasaba el cacharrito del jabón de las manos y las toallitas de papel. En la repisa del baño tenías innumerables colonias, cremas de manos y faciales, gomina y una bandejita para dejar algo de dinero por lo que usaras. A mí esta movida me pareció rara y porque no decirlo incomoda, que si una quiere entrar a guiñar tienes al negro pegao a la puerta. Deja, deja qué yo soy del barrio; estas cosas son demasiado para mí.

Una vez que salimos de allí y comprobamos que la batalla estaba perdida por esa noche decidimos volvernos al campamento base, desde Trafalgar Square nos dimos un paseito de casi media hora y tras llegar al hotel para el sobre. Las camas muy cómodas también.